No por esperado y lógico deja de ser merecido y elogiable el segundo título de Liga conseguido por Biguá el Martes pasado en el Cilindro. En frente estuvo el gran Defensor, que con poco se hizo lugar en la final con un gran basquetbol, simpe, pulido y apoyado en Woodward y Jackson que fueron imparables durante todo el campeonato. Por encima sobrevolaba el fantasma de tener que cumplir con los pronósticos, que a más de uno le ha pesado en los momentos calientes de los campeonatos. Por delante estaba el destino de redondear un período tremendo: campeón de la Liga 2007-08, campeón de la Liga Sudamericana y 3ro. en la Liga de las Américas. Desde dentro maduró el talento de un García Morales intratable, no solo por promediar veintipico de puntos por partido, sino metiendo esos veintipico de puntos marcado por German Silvarrey contra Sayago en la última del Clasificatorio y jugando por las papas fritas, tanto como marcado por Facundo Suckatzy contra Universo en la final de la Liga Sudamericana. Una clase tremenda. Como leí por ahí: con 10 cms. más era estrella de la NBA.
En fin. Por más que no me simpatice mucho como institución, vayan desde acá las felicitaciones al Pato de Villa Biarritz!
20.3.09
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